martes, 28 de junio de 2011

¿Registrar para qué?

Lo que percibo, lo que soy
Es más que conocido por todos, la importancia que ha tenido, para la evolución humana, el papel de los primeros grafismos (pintura rupestre) que desembocaron en la escritura. Podríamos suponer que es innata la necesidad de registrar los hechos, los sentires, los pensamientos, en fin, de expresarnos. Es inherente al humano también, la necesidad que tenemos de perpetuarnos, por ello nuestros ancestros nos han dejado su legado que expresa cómo percibieron el mundo. Una y otra vez observamos los objetos dejados por culturas ancestrales para interpretar y reinterpretar quiénes fueron, de dónde venimos y hacia dónde nos dirigimos. 
Entonces, no es de extrañarnos la proliferación de diarios, bitácoras, cuadernos de notas, cartas, entre otros registros, que personajes históricos construyeron a lo largo de su vida y es a través de éstos que nos enteramos de sus pensamientos, sentimientos y cotidianidades. Son muchos los personajes históricos (que trascendieron su tiempo, en cualquier rama del conocimiento) que llevaron registros. Pero también, los registros, en especial los personales, sirven para darse cuenta de procesos, de hechos, de fantasías, de patrones, de información que escribí sin conciencia. También ayudan en la organización: del tiempo, de las tareas, de los compromisos, como apuntador de memoria, como espacio para que no se me escapen las ideas, para realizar bocetos inspiradores, para planificar vacaciones, sacar cuentas, para copiar rápidamente las ideas "flash" de un proyecto (personal, laboral, etc.)... Revisarlas en la actualidad, ver los registros con un objetivo específico (¿cómo he evolucionado? ¿cuánto he cambiado en torno a..? ¿por qué repito constantemente tal cosa? ¿por qué escribo y después no reviso?) nos puede dar la llave para esa puerta que deseas abrir
Vamos a ir tratando cada uno de estos y otros puntos para que puedas sacarle provecho a tus registros.

Tipos de registros personales
Cualquier estilo de papel sirve
Basándonos en su cuerpo, pueden ser corpóreos de papel como un cuaderno, una agenda, un block, de variados tamaños y estilos, y los hay virtuales, que se publican en una página web, en un blog, construidos a través de e-mails, grabados de voz y, de voz y video, y en CD´s, DVD´s y otras tecnologías. 
El lenguaje utilizado puede ser escrito, visual (dibujos, bocetos, pinturas, collages, fotografías, videos -voz y gestos-, etc.), auditivo (voz, sonidos, ruidos).
El contenido puede ser real, fantasía o proyección. Puede referirse al presente al pasado o al futuro.
Por supuesto, está demás decir que existen todas las combinaciones que se les ocurra y otras más.


Interacción
Reflexiona:
  •  ¿Llevas algún tipo de registro? Cuéntanos ¿en qué consiste? ¿cómo lo usas?
  • ¿Cuáles son los personajes históricos que llevaron registros y te llaman la atención? 
Te invito a que participes y construyamos un listado para publicarlo en este blog, donde se respetan los créditos, por supuesto.
Contactos: E-mail, o a través de los comentarios.
Fuente: Moleskine