miércoles, 29 de agosto de 2012

El ocio y las vacaciones


Luego de estar inmersos en la rutina diaria, es bastante conocido por todos que bien nos merecemos un descanso. Nuestra mente y nuestro cuerpo necesitan descansar, sentir que el estrés no es el que lo motoriza, sino actividades que generen placer, sosiego o satisfacción, aunque impliquen cansancio físico. Estas actividades son fundamentales, incluso diariamente, tanto así que el científico (demógrafo, matemático) James Vaupel expresa que "el siglo en el que estamos va a ser el siglo de la distribución del trabajo, del entretenimiento, del estudio", ya que gracias al mejoramiento de nuestro nivel de vida y los adelantos médicos (tecnológicos), hemos ido aumentando el tiempo de vida del humano en tres meses por año. Sin embargo, aún tenemos una estructura organizativa del tiempo dividida por bloques de actividades, tenemos varios períodos al año y en especial uno en el que dejamos nuestros trabajos y estudios, es decir, nuestras actividades habituales y nos concentramos en el ocio: Las vacaciones, espacio temporal donde cesan las actividades laborales y estudiantiles.

Revisando el concepto de ocio, nos encontramos que la RAE la define como descanso o cese de actividades regulares por otras divertidas o reposadas y que suele estar relacionadas con el desarrollo del ingenio, lo que nos indica que son actividades que decidimos hacer por decisión personal y por lo tanto prestamos una atención especial, esa que nos permite estar en  el aquí y el ahoraen el presente, que tomamos con actitud más relajada y con un compromiso más centrado en el disfrute. 
Las emociones presentes durante actividades que nos interesan y nos divierten son las que nos permiten interpretar y guardar nuestras experiencias y si éstas son placenteras influyen directamente en la percepción de una mejora de la calidad de vida, "los recuerdos cambian constantemente nuestra forma de percibir el mundo" (Kia Nobre, 2011). 
Tener un hobbie, o realizar paseos al aire libre, leer un libro o simplemente compartir con los amigos son actividades que pueden resultar altamente estimulantes.
El ocio es la manera ideal (sana) de darle a nuestro cuerpo y a nuestra mente la oportunidad para relajarse, hacer actividades diferentes, esperadas o postergadas, resultan estimulantes y causan efectos positivos en nuestro organismo y en la percepción de nuestra calidad de vida, aspectos que bien vale la pena realizar a conciencia y que nos dan más elementos para auto-observarnos y en definitiva autoconocernos.