n oportunidades anteriores le he dedicado una atención especial a los Diarios de Artistas y a los Diarios de Viajes, en esta oportunidad se lo dedicaré a los Diarios Íntimos.
Cuando las personas oyen la palabra Diario piensan justo en un diario íntimo, ese donde plasmo (escribo, dibujo, intervengo, pinto, etc.) mis más internos y profundos pensamientos, sentimientos, hechos. Usualmente, el diario íntimo funciona como una conversación consigo mismo, que ayuda al interlocutor a identificar las ideas, a organizarlas y a poder releerlas a manera de feedback, hecho que permite apartarse un poco de sus propios escritos y examinarlos desde otra perspectiva, "como desde afuera" y ésto trae como ventaja darse cuenta de aspectos personales que de otra manera no pudiese notar. Por supuesto que este proceso no es lineal, además la posibilidad de saltar pasos y devolverse sobre ellos es muy frecuente.
El contenido de estos diarios íntimos no necesariamente es impresionante a los ojos de otros, pero siempre es muy importante para su creador, es significativo, valioso y definitivamente recoge o sintetiza un hecho.
Diarios Íntimos |
Todas las personas que han escrito diarios íntimos tienen básicamente el propósito de conversar consigo misma, de escucharse, acompañarse y comprenderse, lo que repercute directamente en el proceso del autoconocimiento, quizás no lo tengan muy consciente al inicio, pero seguro que con el tiempo se darán cuenta de las consecuencias positivas de su autoobservación.
Posiblemente el Diario Íntimo permite desnudarnos ante nosotros mismos, sin embargo necesitamos de mucha fuerza, determinación y entereza para "quitarnos toda la ropa", pero no hay de que preocuparse, si lo único que he podido hacer es verme en el espejo vestido(a), debo recordar que el autoconocimiento es un proceso y que también tiene su ritmo, "yo" tengo mi ritmo.